El Partido Popular de El Burgo de Osma, reunido en Junta Directiva ordinaria el 1 de julio, ha expresado su rotunda oposición a la decisión del gobierno de Zapatero de subir el impuesto sobre el valor añadido (IVA) que entró ese mismo día en vigor. El PP burgense considera que esta medida es sumamente perniciosa para todos los ciudadanos, especialmente para los menos pudientes, ya que encarecerá el precio de todos los bienes y servicios provocando una retracción del consumo o, en su defecto, una reducción de los márgenes de beneficio de las, ya de por sí castigadas, pequeñas empresas. Esta nefasta medida, en una situación de paro que supera los cuatro millones y medio de desempleados, de un galopante endeudamiento público, de unas bajadas del poder adquisitivo de los pensionistas y del sueldo de los empleados públicos nunca vistas y de una subida de los costes de la vida cotidiana (la última la del gas y la del butano), denota la insolvencia del gobierno del PSOE que está siendo una verdadera calamidad sin paliativos para España y que está haciendo pagar sus errores a los ciudadanos y a las familias.
La subida del IVA en esta situación de crisis es una medida incomprensible, antisocial, rabiosamente insolidaria y profundamente injusta pues sus efectos los sentirán más las rentas más bajas, como ocurrió en la anterior subida del mismo impuesto del IVA, decidida también por un gobierno socialista en 1995, que, lejos del objetivo de recaudar más, provocó un aumento del fraude fiscal y de la economía sumergida. Subir el IVA y hacer recortes sociales a la gente que más lo necesita no es la solución a la crisis. Con este tipo de medidas se pone aún más en evidencia que la gran aportación del PSOE cuando alcanza el gobierno de la nación es hacer a los españoles más pobres.
La subida del IVA en esta situación de crisis es una medida incomprensible, antisocial, rabiosamente insolidaria y profundamente injusta pues sus efectos los sentirán más las rentas más bajas, como ocurrió en la anterior subida del mismo impuesto del IVA, decidida también por un gobierno socialista en 1995, que, lejos del objetivo de recaudar más, provocó un aumento del fraude fiscal y de la economía sumergida. Subir el IVA y hacer recortes sociales a la gente que más lo necesita no es la solución a la crisis. Con este tipo de medidas se pone aún más en evidencia que la gran aportación del PSOE cuando alcanza el gobierno de la nación es hacer a los españoles más pobres.